A la ola de denuncias por acoso laboral en la Policía Nacional que han interpuesto varios agentes en contra de sus superiores, se suma la de un patrullero que dijo haber sido golpeado por un sargento y recibió una incapacidad por 30 días. 

Los hechos, sucedidos el 2 de marzo, los dio a conocer Simón Caicedo, padre del uniformado, quien manifestó en Noticias Caracol que su hijo permanece internado por “estrés agudo” y que no quiere regresar a la institución por el acoso al que ha sido sometido en el comando de Policía del municipio de Guasca (Cundinamarca).

La Dirección de Sanidad y los dictámenes médicos confirmaron que el patrullero permanece en  la Clínica La Inmaculada, e incluso trascendió que ha intentado suicidarse para no seguir en la institución. 

Simón Caicedo contó que un sargento, en estado de embriaguez, golpeó fuertemente a su hijo y a otros dos patrulleros que fueron acusados por un civil de haberles dado dinero para no inmovilizar una motocicleta. 

“A mi hijo lo cogió el sargento, desde las 10:30 de la noche hasta la 1:00 a.m. Lo botó al piso a él y a otros dos compañeros. Les dio bolillo, pata, puño. Los golpeó muy fuerte”, precisó Caicedo. 

La Policía Nacional inició una investigación para determinar las circunstancias de los hechos y dar con los responsables de la agresión.